A Marte le encomiendo mi problema,
amarte es una guerra de bolsillo.
Amar la mar sería más sencillo
que amordazar mi amor con fría flema.
Soldado soy, mi espada es mi poema
y tú eres mi sol dado con tu brillo.
Fundido estoy soldado en tu amarillo
crisol dador del fuego que más quema.
No basta la más vasta y cruel batalla
para vencer, si acaso, tus ocasos
pues sólo ves mi cana ya canalla.
Seré por siempre sombra de tus pasos.
Si nunca me das paso a tu muralla
me vestiré del frac de mis fracasos.
Já!, te encontré y me dí una pansada con tus poemas
ResponderEliminar...seré por siempre la sombra de tus pasos...
un saludo
emily1
amarte a marte, soldado sol dado, criSOL DADOr .............ocaso acaso...estabas juguetón?
ResponderEliminarBunbu
El amor es una buena causa y un poema la mejor arma aunque a veces perdamos algunas batallas. Felicidades, Luis.
ResponderEliminarSaludos
Muy bueno ese poema con el juego de palabras. Sé que tiene un nombre poéticamente, pero no lo recuerdo.
ResponderEliminarMagnífico, como siempre.
Felicidades, amigo. Un abrazo.
Cultivar el soneto ya es de por sí una proeza... Saludos poeta
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