Hundidos en la tierra,
esperan el momento de su gloria.
El tiempo de una guerra
que nunca vio la historia,
la lucha más oscura y decisoria.
Los muertos caminantes
de bocas retorcidas y malvadas,
de lívidos semblantes
y garras como espadas
regresarán con ansias renovadas.
Devorarán la vida
llevados por el odio del vacío
y el hambre desmedida.
Con un escalofrío,
el mundo probará su poderío.
No hay tiempo para un plan
porque el apocalipsis es mañana.
Los muertos volverán;
la noche está cercana.
Desaparecerá la raza humana
Estooo, no se puede negar que un poema sobre zombies es original, tétrico y algo aterrador, pero original.
ResponderEliminarSiempre he dicho que si Espronceda levantara la cabeza ... ¡sería un zombie!
ResponderEliminarGracias por leer y por tu comentario.