sábado, 19 de noviembre de 2011

EL HOMBRE DEL ASCO

Vigilando entre las sombras,
en una esquina del cuarto,
hay una mueca siniestra;
le llaman Hombre del Asco.
Es el hijo de la envidia
y es el padre del sarcasmo.
Lleva un asco de arpillera
tan dura como el rechazo,
inflado de frustraciones
y de sueños destrozados.
Unas veces se le encuentra
reflejándose en el vaso
oscuro de hielo y whisky
en mis temblorosas manos.
Otras veces son las huellas
de un camino que no andamos
por miedo, rabia o pereza,
pero que vuelve a gritarnos
¡mira el tiempo que has perdido,
pensando, siempre pensando,
siempre temiendo a la vida,
eres un joven anciano!
Ten cuidado si te duermes
queriendo ser enterrado,
es posible que visite
tu cama el Hombre del Asco.



2 comentarios:

  1. Bueno, Luis, gracias por tu comentario en mi blog. He estado curioseando por el tuyo y me gusta todo lo que he visto. Creo que tenemos un concepto tú y yo bastante aproximado de lo que es la poesía. No veo un correo electrónico al que me pueda dirigir a ti en privado. Si me escribes al mío te haré un par de sugerencias, aunque no quiero obligarte a nada, si no lo haces, no pasa nada. Yo pienso seguir disfrutando de tu poesía. Saludos.

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  2. Es un honor contar con tu presencia en este blog, Love (por cierto, genial el nick)

    Espero que disfrutes con tu estancia por estas páginas.

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